Qué se puede decir, 9 añazos ya, parece que fue ayer pero no, muchas cosas han pasado, y año tras año hemos ido recordándolo. Tomé este compromiso de recordarte año tras año, y aquí estoy ante el ordenador, ante un sábado lluvioso pero lleno de energía y de planes.
También este día supone un día de echar la vista atrás, ver como ha ido el año, y los cambios que ha habido en el sentimiento respecto a tu partida.
Este año viene marcado por los progresos que va haciendo el pequeño Ager, que se parece cantidad a su aita, y que incluso hemos hecho algunos intentos de recuperar viejas relaciones familiares, y hemos recuperado viejos recuerdos tuyos como esa cinta de audio en la que me hablas con gran esfuerzo en euskera, y tienes una infinita y enorme paciencia con ese crío de 3? años, que soy yo.
Sin duda que el tiempo es una potente arma hace ver las cosas de otra manera, lo cura todo dicen, y cierto es, pero además te vas dando cuenta de que aunque no estés físicamente al lado la información genética es muy fuerte, y dices, joer, si esto lo hubiera hecho aita también, le hubiera encantado verme, hubiera compartido ésto con él… y sientes un orgullo en el momento brutal: el euskara, la app kantari y los kantaris… ir al monte (al Paga) con los amigos (el otro día estuve con el guarda por cierto que tan bien se portó en tu despedida), eso sí yo voy andando no corriendo como subías tú, y ahora me he aficionado también a hacer un poco de footing pero eso sí sobre asfalto. Las asambleas y las mil batallas… (sigo conociendo a viejos compañeros tuyos de mil historias)… Ayer fui a donar sangre, de quién habré aprendido eso, y allí estaba una niña con su aita aprendiendo como funcionaba la donación, jejeje…
En fin aita, tengo que dejar el teclado que he quedado para un plan que tu no harías seguro, ¡pero claro ama también puso lo suyo! Y menos mal porque es la mejor, y la queremos montonazo. Que el tiempo lo cura todo y si bien estás todos los días en forma de genética, y bonitos recuerdos, y en las gentes que compartieron contigo diferentes historias, hoy como es un día especial aquí estoy frente a los bits y bytes que tanto te gustaban: gero arte aita!
Otros años:
Un año más estaba esperando tu carta, sabía que no fallarías.
Nunca he hecho ningún comentario pero como bien dices el tiempo va curando las heridas, aunque queda la cicatriz cuando la herida es profunda.
Aita fue un gran hombre, que en su corta vida sembró lo que yo estoy recogiendo de vosotros, sois dignos hijos de él.
Musus eta eskerrik asko.
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